jueves, 10 de septiembre de 2009

Imaginandote

Cada vez que voy al retiro, como hoy, no puedo evitar acercarme a este lugar donde los árboles parecen sacados del cuento de Alicia en el país de las maravillas.

Siempre vengo aquí, me divierto imaginandote en aquel banco frente al gran vetusto árbol aguardando mi llegada. No puedo evitar reconocer que aquel día, según me fui acercando, paré de caminar, me apoyé en la barandilla y te estuve observando unos segundos desde allí arriba, maravillada por aquel paisaje, tu.
Parece que aún sigues allí sentado, en la misma postura desde entonces, inmerso en tu lectura, cabizbajo, con tu peculiar manga larga a pesar de ser un día de primavera de ésos que el sol deshace la ropa.

Ya no te busco, no me importa, tan solo te imagino, sin esperar nada a cambio, volviendo a disfrutar de esa sonrisa inocente cuya inocencia se desvaneció con el tiempo, se envenenó con miedos y mentiras.


Pero eso apenas lo recuerdo, ya dejó de tener sentido, tan solo imagino que aún sigue tu silueta, allí, lejana. Me divierte, sonrío, doy la vuelta y sigo mi camino.

3 comentarios:

  1. ¡¡¡¡Precioso texto!!!

    Me llego la frase "Ya no te busco, no me importa, tan solo te imagino, sin esperar nada a cambio, volviendo a disfrutar de esa sonrisa inocente cuya inocencia se desvaneció con el tiempo, se envenenó con miedos y mentiras."

    Un beso y buen fin de semana

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  2. Me encanta tu blog!
    Y también me ha impresionado la misma frase que a ella.
    Pero todo es precioso! He leído muchas entradas tuyas en esta última hora.
    Un beso.
    Anais.

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  3. Ey! pasate por el blog, que hay un premio a recoger!

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