sábado, 28 de marzo de 2009

Sí o No

Llevo un tiempo diciendo sí cuando en el fondo sé que debo decir No. A tí también te pasa, ¿verdad?

Cuántas veces lo habremos hablado y sin embargo, no han sido suficientes.

Estoy escribiendo estas líneas y aunque parezca una tontería, me paro, como si no quisiese continuar, como si realmente no quisiese ser lo suficientemente valiente para decir No. Hay algo en mi interior, inclasificable, inexplicable que late con fuerza y hace que continúe, me anima a que viva el momento para coleccionar "momentos felices" . Pero otra parte de mi interior llena de neuronas que se agitan continuamente me susurra ¿para qué?

Me ahogo, abro la ventana y me asomo pero el aire no llega a mis pulmones. Corro, huyo, aunque inevitablemente miro hacia atrás con la esperanza de verte una vez más.

Unas veces te creo, otras te dudo y las demás me miento. Unas veces me conformo con tenerte pero no. Otras veces quiero más, todo, y te necesito, te quiero. Y las demás lo que necesito es no tenerte, olvidarte.

Olvidar tus abrazos, tus sonrisas, mi nombre saliendo de tus labios, tus besos, tu cuerpo, tu voz, tu todo, tu nada...

¡¡¡Quiero pero no quiero!!!

miércoles, 18 de marzo de 2009

La playa

Es de noche, la majestuosa luna brilla protahonizando este paraje, sin ningún reparo se refleja en el profundo mar infinito.

  • ¿Tienes fuego?- pregunto.

  • que va, con esta garganta no puedo.

  • aaaahhhhhh

  • ¿qué escribes, poesía?

  • no, prosa

¡qué chico! Moreno, atractivo, simpático, qué voz...acaba de pasar frente a mi tumbona, es cierto, no es un lugar muy corriente para conocer gente, mal momento.

Se va, sigue caminando por la orilla sin saber que aquí estará para siempre conmigo.

Creo que se acabó la tranquilidad, un grupillo hace botellón a tan solo tres tumbonas de aquí. Procuraré no escucharles y seguir con mis pensamientos...

La vida en soledad es muy dura, siempre hay alguien que evita que un sábado como hoy esté sola. Tan solo llevo unos días totalmente sola y no creas, a veces es genial, divertido y fácil pero otras es tan, tan triste...


Podría volver aquel chico, me ha hecho sonreír.

Las olas rompen a la orilla, siempre tienen el mismo final que a su vez se vuelve a convertir en su principio. Empieza a refrescar, me froto los brazos. Pero estoy tan agusto oyendo el sonido de las olas al romper, tan agusto admirando esa gran luna imperial...creo que aguantaré un poquito más. Me acuesto sobre la tumbona y me quedo perpleja mirando la luna, ¡qué belleza!

Me incorporo y veo a lo lejos una figura, parece ese chico. Se acerca, me mira mientras una amplia sonrisa deja ver su perfecta dentadura, comienza hablar. No sé cuanto tiempo pasó, solo sé que nos sorprendió el amanecer, solo sé que fue fugaz. Le guardo en mi recuerdo, ese día entendí lo que es amar.

martes, 17 de marzo de 2009

Caos

Pienso, qué pienso

Digo, qué digo

Sueño, qué sueño.




Ya no sé, si

sueño que pienso,

pienso que digo

o digo que sueño.




Y qué es lo que yo escribo, si

ni pienso, ni sueño, ni digo,

si sueño mi vida o mi sueño vivo.

Ayer le vi...

Ayer le vi, iba paseando por el otro lado de la calle. Inmerso en sus pensamientos, seguramente escuchando música. Sus ojos no mostraban tristeza ni alegría, más bien parecía melancólico, en otra realidad. Cabizbajo y con la mirada perdida. Pero ya no era por mi.

Volvieron a mi mente miles de recuerdos de otro tiempo, de otra vida. Me volví a ver reflejada en esos ojos grises, volví a sentir el roce de sus labios que ya no sabían a nada. Recordé los gritos, las caricias, los sin sentidos, hacernos el amor, el odio, las risas, las lágrimas, correr de un lado a otro, el no saber qué hacer, la desesperación, el caos, la locura, el olvido.

Me escondí tras una ventana queriendo y sin querer que mirase hacia donde esperaba paciente que desapareciera. Parecía tan distante...metido en su mundo, sin que ya fuese el mío...

Poco a poco fue perdiendose entre la multitud de aquella calle madrileña. Tan lejos, tan cerca...
Aliviada cogí mi mochila y volví a salir a la calle. Tranquila, habiendo descubierto una realidad que nunca antes quise ver. Tenía razón, lo nuestro nunca tuvo sentido. Nunca existió.


jueves, 12 de marzo de 2009

Pablo Neruda

Tengo que reconocer que soy nueva en esto de la poesía, y fue ayer cuando trasteando por youtube, encontré este poema. Se me puso la carne de gallina, no sabía que alguien pudiese explicar tan bien un sentimiento así. Es espectacular,íncreíble...

http://www.youtube.com/watch?v=B8LxNEx1ETM

jueves, 5 de marzo de 2009

¿Por qué no puedo odiarte?

Tras haber compartido tantas cosas juntos, te has ido. Me dejaste aquí, sola, recordando. Me peleo contra mí misma porque quiero pero no puedo olvidarte. Desapareciste sin contestar a mis preguntas ya formuladas, pude notar tu indiferencia, sé que te olvidaste de pensar en mi y aún así te sigo recordando cada día.
Todo lo cura el tiempo, dicen, pero va pasando el tiempo y por muy ocupada que esté siempre, aunque sea un segundo del día, te cruzas por mi mente. Ojalá pasara ya todo el tiempo necesario para ya haberte olvidado.

Me resultaría más fácil poder odiarte para olvidarte pero no lo consigo. Por más que pienso paso a paso lo que ocurrió, el cómo te comportaste y lo mal que me ha hizo y me hace sentir no consigo odiarte.

Los días que me sorprendo pensando en tí me regaño, me castigo mirando a la pared y me vuelvo a repetir que no lo mereces pero no consigo convencerme porque vuelvo equivocarme día tras día y vuelves a aparecer en mis pensamientos.

Con lo fácil que resultaría estar tan enfadada contigo que no quisiese recordar los momentos buenos y así, tener solo presente los malos: tu falta de escucharme y más que de escucharme de querer entenderme, tu soberbia, tu egocentrismo, tu "inestabilidad emocional" y tu falta de tacto al final. Así, sí que podría odiarte.

martes, 3 de marzo de 2009

Rosa

Cuando me levanto por la mañana y el sol ha desaparecido, cuando camino por la calle cabizbaja y solo existe el gris, cuando dar un solo paso requiere un gran esfuerzo, cuando me canso de la ausencia de color en mi vida...Es entonces cuando saco mis gafas rosas del cajón y cambio el mundo a mi antojo, todo se vuelve de color, se convierte en algo mágico.

Me pongo mis gafas y el mundo se vuelve rosa, desaparece la gris tristeza y la gente empieza a sonreír, parece que sale el sol, la alegría envuelve todo mi alrededor.

Sé que no es real pero no me importa, prefiero ver el mundo que he creado, prefiero verlo como a mi me gusta, prefiero imaginar que ésta es la realidad, vivir este universo solo mío.